Mi «coup de gueule» de fin de
año,
para bien; todos debemos ser libre de pensar, expresarnos y actuar con empatía.
¡ Para 2014,
reciba mis
mejores deseos
de salud, ánimo,
de salud, ánimo,
seguridad y paz!
Bastante picosa, la mejor salsa
mexicana del año 2013:
a- disgusto por la democracia;
b- poder cásico que
impone sus transas mediante reformas;
c- una oposición dividida, suspicaz,
criticona, sin proyección hacia el futuro;
¿quién se la come?
Con objetividad le comparto la
reseña concisa de Leo Zuckerman, “Este año”:
Encima de todos estos
acontecimientos, he concretado un proyecto personal con afán de sensibilizar la
gente a la prevención y la protección personal mediante la vulgarización del
lenguaje y de los conceptos inherentes a la cultura de la seguridad, a ejemplo
de la prevención del secuestro. En mi libro El
arte de la protección, enseño un camino donde está difícil mantener el paso,
a costa de una sociedad muy arraigada en la corrupción, a costa de los malos
hábitos anclados en el inconsciente colectivo. Sin embargo, la fuerza de las
palabras está allí, anhelando que el lector se sume al esfuerzo de
transformación de la sociedad, mostrando compromiso y empatía, en oposición a
los intereses personales ultra liberales y violentos en contra de los menos
afortunados.
La vida es para deleitarse y combatir
injusticias. Alternando con reformas y fases de recuperación, es así como percibo
y paseo en la vida, año tras año.
En estos días que marcan el
cierre del 2013, es de tradición reflexionar y mandar un mensaje de esperanza.
“Que la conciencia colectiva se despierta en contra de la misantropía y los
monopolios ultra liberales.”
¡ Para 2014,
reciba mis
mejores deseos
de salud, ánimo,
de salud, ánimo,
seguridad y paz!
